El ministro argentino de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Basterra, sostuvo que al país “se le abre una ventana de oportunidades” en materia de provisión de alimentos, de cara al actual contexto de crisis a nivel global por la pandemia de coronavirus.
“En esta situación de crisis y debacle de la demanda mundial, al país se le abre una ventana de oportunidades, porque alimentos no se van a dejar de demandar, y Argentina no dejó de producir”, dijo el funcionario en un reportaje que publicó hoy el diario Página 12.
”Veo al menos dos sectores que claramente pueden ser motores de una expansión de la producción y también del ingreso de divisas al país, el de carne de cerdo y la pesca”, agregó el ministro.
Al analizar los primeros cinco meses de gestión, Basterra aseguró que “nos hicimos cargo del gobierno con un país en estado cataléptico en su situación macroeconómica. Una de las primeras decisiones que tomamos fue actualizar los derechos de exportación, para volver a un esquema que el propio ex presidente (Mauricio) Macri había dispuesto, pero dándole el beneficio al sector de una retención sobre la soja pero con un dólar fijo en cuatro pesos”.
“Esto provocó una reacción muy fuerte por parte de las cuatro entidades de la Mesa de Enlace. Nos llevó un tiempo importante discutir y explicar que había sido un acto de irresponsabilidad ligar las retenciones a un valor fijo del dólar, y además bajo la promesa de que el dólar se iba a devaluar y que, consecuentemente, se licuarían los derechos de exportación”, detalló el funcionario.
Tras este conflicto inicial, con la aparición del primer caso de coronavirus en el país a principios de marzo, el conflicto con el campo pasó a ser “un tema secundario” y “dejando de lado diferencias coyunturales y conceptuales, empezamos a imaginarnos y diseñar una estrategia preventiva” para enfrentar la pandemia desde el plano productivo, agregó el ministro.
“Creo que para Argentina se abre una interesante oportunidad, un desafío. Porque, en términos relativos, frente a un mundo que va a estar en crisis, donde va a caer la demanda global, la de alimentos es más inelástica. Y Argentina no dejó de producir alimentos”, repitió Basterra.
“El país puede llegar a mantener una alta presencia en un sector de alto peso en la estructura de producción y también en la de ingreso de divisas. Algunos especialistas dicen que se abre una ventana de oportunidades comerciales de dos o tres años para un país como Argentina. Yo creo que puede ser más corta, pero algo de eso va a ocurrir”, concluyó el ministro.