Estados Unidos, Reino Unido y Canadá extienden su profunda gratitud al gobierno de Uruguay por apoyar con éxito las repatriaciones de viajeros que se encontraban a bordo de cruceros en el Atlántico Sur cuando la pandemia por el COVID-19 llegó a América del Sur.
Uruguay autorizó que los cruceros atracaran en el Puerto de Montevideo y proporcionó un corredor humanitario para que los pasajeros fueran trasladados de forma segura hacia vuelos comerciales y chárter salientes del Aeropuerto Internacional de Carrasco sin poner en riesgo al público uruguayo.
La operación de la Cancillería de Uruguay permitió que 556 ciudadanos regresen a sus países de origen.
Representantes de las tres embajadas en Montevideo destacaron la pronta y efectiva respuesta del gobierno del presidente Luis Lacalle Pou.
Los esfuerzos de Uruguay reflejan su larga tradición humanitaria y su compromiso con la cooperación internacional, expresó un comunicado conjunto de las tres embajadas.