Una inversión china en energía renovable en la Patagonia se detuvo después de que no se pudo llegar a un acuerdo con la pequeña comunidad mapuche que vive donde se instalarían los aerogeneradores.
La empresa china Envision Energy SA había prometido invertir 56,7 millones de dólares estadounidenses en Cerro Alto, en la provincia de Río Negro, a 85 kilómetros de Bariloche.
En 2016, la compañía ganó la licitación en la primera ronda del programa RenovAr. El plan incluía 28 aerogeneradores capaces de producir dos megavatios cada uno. También habría significado 300 empleos temporales.
La energía iba a ser inyectada en la línea de alto voltaje de Bariloche, pero la comunidad mapuche de Wefu Wechu exigió que se construyera una línea paralela de 32 kw para sus asentamientos a cambio de su consentimiento. Además del suministro de electricidad, los mapuches supuestamente querían su tajada en efectivo, algo similar a lo que sucedió oportunamente en Vaca Muerta.
Según una convención internacional de trabajo sobre pueblos indígenas, no es posible violentar la decisión de las comunidades aborígenes cuando los proyectos empresariales tocan sus tierras ancestrales. Los mapuches afirman que Cerro Alto está imbuido de una energía especial.
Y la compañía china no estaba dispuesta a pagar el costo adicional, estimado en 500,000 dólares estadounidenses más los retrasos que causaría a su agenda.
Las promesas de instalar líneas compensatorias en fechas posteriores no convencieron a la comunidad de Wefu Wechu.
El proyecto de Cerro Alto recibió otro golpe debido a los retrasos en la garantía del Banco Mundial, una condición requerida por el directorio de Envision Energy para mitigar los riesgos del desembarco en Argentina.
La firma china tiene proyectos similares en García del Río (Buenos Aires), Vientos del Secano (Buenos Aires) y Los Meandros (Neuquén).
En ámbitos empresariales se rumorea que la compañía se está enfocando en sus empresas mexicanas, más libres de obstáculos, a expensas de las de la Patagonia.
Según el acuerdo original, Cerro Alto debía suministrar energía para marzo de 2019, algo que no ocurrirá y por lo cual el gobierno federal ha impuesto una multa de 10 millones de dólares a la compañía china.