El Presidente de Argentina, Mauricio Macri, habló el viernes por primera vez en público sobre el caso de sobornos que implica a ex funcionarios de los gobiernos kirchneristas con empresas del rubro energético y de la construcción, conocido como el caso de los cuadernos de las coimas o también el Lava Jato argentino, y pidió a la justicia de su país que demuestre que no hay impunidad.
En los últimos días hemos visto noticias que, si la justicia las confirma, son muy negativas en términos de consolidar confianza. Cuando ustedes escuchan de esos cuadernos, cuesta creer que podemos todos juntos construir una Argentina distinta, todos dentro de la ley, afirmó el Mandatario en un acto público celebrado en el municipio de Quilmes.
En este sentido, recalcó que por eso hoy más que nunca necesitamos que la justicia nos diga si eso es verdad, que la justicia nos demuestre que no hay impunidad. Necesitamos creer en nosotros mismos, en que esto sí lo vamos a cambiar. Queremos que todos nos comportemos dentro de la ley. A veces uno siente que hay unos pocos que nos toman el pelo a millones. Que nos toman el pelo porque somos millones los que hemos decidido vivir la aventura maravillosa que es la vida dentro de la ley, cumpliendo con todas las reglas. Y hay un grupito que no. Se creen que son dueños del poder y que están arriba de todo esto. Y nos quieren hacer sentir que esto no tiene arreglo, que es así. Y no es verdad, enfatizó.
De este modo, el Mandatario expresó su deseo que nunca más el vivo, el que toma el atajo, sea al que le va bien; que nunca más el que abusa del poder sea el que saca ventaja; y que la política sea para servir a todos los argentinos. Una Argentina justa es eso, una Argentina que se basa en la cultura del trabajo.
El miércoles, la justicia argentina detuvo a 11 personas, entre empresarios y ex funcionarios de los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández por un caso de corrupción cuya indagatoria inició tras el hallazgo por parte del diario La Nación de Argentina de ocho cuadernos que describían, con lujo de detalles, la entrega de bolsos con grandes sumas de dineros a representantes del Ejecutivo de parte de empresas constructoras y del rubro energético.
Los apuntes corresponden a Oscar Centeno, chofer de Roberto Baratta, quien fue mano derecha del entonces ministro de Planificación, Julio De Vido. En las anotaciones, se cuenta cómo funcionaba esta asociación ilícita que era encabezada por el propio Néstor Kirchner, y que habría recaudado unos 200 millones de dólares. Tras los arrestos del miércoles, la justicia detuvo a otras tres personas, y se espera que las indagatorias continúen.