El Director de Recursos Naturales de las Islas Falkland, John Barton confirmó que el intercambio de información sobre pesca y caladeros se reanudará dentro de muy poco tras el reinicio de conversaciones al respecto que se celebraran en Buenos Aires el mes pasado.
Barton también confirmó planes para cruceros de investigación científica conjunta, tal cual se cumplían en los años noventa, a la vez que reveló que una próxima reunión ha sido programada para tener lugar en Londres hacia fines de este año.
Dirigiéndose a la Comisión de Pesca, Barton también respondió a las inquietudes expresadas por sus integrantes y les reaseguró que el intercambio de información sería mutuo, o sea en ambas direcciones.
La Comisión también consideró un proyecto que establecía las capturas totales permitidas, y esfuerzos totales admisibles para el 2019. El esfuerzo recomendado permanece prácticamente incambiado. Al hacer la presentación del proyecto, el científico del departamento de pesca, Andreas Winter reveló que el caladero de peces con aleta se encuentra en proceso de transición y por tanto se recomienda que el esfuerzo de pesca sea fijado de acuerdo a las prácticas actuales.
También se estableció que si bien las recientes capturas de estas especies han sido menores al rendimiento máximo sostenible, y la evaluación de los stocks indican una biomasa muy grande, esto sugiere que los stocks más bien se han desplazado y no necesariamente han sido agotados.
En una puesta al día de su cartera, Barton también confirmó que los mecanismos implementados para impedir la muerte de lobos marinos fueron dispuestos durante la última temporada de captura del calamari (calamar loligo) y adelantó que la industria además iba a disponer de observadores durante la segunda temporada.
La representante de la industria de pesca, Cheryl Roberts, sostuvo que las medidas implementadas para reducir la interacción con lobos marinos le han costado a la industria más de £800,000 y pidió que esas medidas sean financiadas conjuntamente con el gobierno de las Islas, FIG.
Los representantes de la industria de pesca de las Falklands también expresaron preocupación porque el proyecto para la política del manejo del descarte en las capturas había sufrido cambios pero, ellos no habían sido consultados. El proyecto que pretende reducir las pérdidas de aves marinas, (ávidas de comer los restos descartados durante los arrastres), requerirá que los pesqueros cuenten con un lugar donde almacenar tanques con dichos restos durante la duración de la operación de arrastre, a menos que se les brinde una dispensa especial.
La industria está preocupada por la necesidad de contar con dispensadores para los pesqueros actuales en operación y resaltó que la política reformulada se había concentrado en los pesqueros nuevos. También se hizo notar que los pesqueros reemplazantes, bajo la nueva política, deben conformar a los mismos requisitos.
La industria reiteró que está comprometida con dicha política y sus propósitos pero algunos detalles, que anteriormente no habían sido compartidos, tienen implicancias técnicas que requieren de una mayor consideración.
Barton dijo que dicha política retiene la suficiente flexibilidad como para reflejar las restricciones técnicas y de seguridad de las naves en operación, pero en cuando a las naves reemplazantes, era importante que no fueran tan flexibles como para bastardear el propósito de la política. (PN).