El joven de Malí, Mamoudou Gassama, convertido en un héroe por salvar la vida de un niño de 4 años en París, recibió el martes un documento que regulariza su situación en la prefectura de Bobigny (norte de Francia), confirmó esta institución en Twitter.
El joven, hasta ahora sin papeles y bautizado como “Spiderman” por haber trepado por las terrazas de un edificio para salvar al pequeño, recibió un resguardo que le permite obtener un permiso de residencia, primer paso antes de conseguir la nacionalidad francesa que le prometió el presidente de Francia, Emmanuel Macron.
Además, Gassama firmó un contrato para colaborar durante diez meses en la brigada de bomberos de París, como le propuso ayer Macron, “para que pueda repetir a diario su gesto de valentía”.
Este maliense de 22 años, que llegó a Francia el pasado septiembre, sólo tardó medio minuto en escalar la fachada de un edificio para salvar a un niño que se había quedado colgando del balcón el pasado sábado en París.
Este rescate, que no tardó en hacerse viral en las redes, fue alabado, además de por Macron, por diversos políticos, por el ministro francés de Interior, Gérard Collomb, y por el presidente de Mali, Ibrahim Boubacar Keïta, entre otros.
Algunas asociaciones de defensa de los derechos de los inmigrantes criticaron la “hipocresía” de la promesa del Gobierno de nacionalizar a Gassama, pues aseguraron que ello enmascara la dureza que, en su opinión, caracteriza su política migratoria francesa.