Las autoridades italianas detuvieron este martes a “la patrona” de Cosa Nostra, hija y esposa de temidos capos de la mafia siciliana, acusada de liderar la organización criminal tras la reciente muerte del capo máximo Toto Riina.
Hija de un conocido capo de la mafia, María Ángela Di Trapani estuvo siete años en la cárcel por transmitir las órdenes de su esposo, Salvino Madonia, otro capo, mientras cumplía condena a cadena perpetua por el asesinato en 1991 del conocido empresario siciliano Libero Grassi.
Desde septiembre de 2015, la patrona al parecer decidió tomar las riendas de la organización y pasar de mensajera a jefa para poder dirigir los varios clanes de la Cosa Nostra. Según la prensa italiana, una serie de escuchas telefónicas revelaron que la mujer es la nueva jefa, lo que ha ocurrido en el pasado en otras ocasiones, cuando la organización se queda sin líder y no puede darse el lujo de perder territorio y peso en el tráfico de droga y la extorsión.
Con la muerte de Toto Riina y la detención de numerosos capos, María Angela Di Trapani, del clan de la familia Madonia, asumió el papel de reorganizar la mafia, según los carabineros. Gracias a los lazos familiares, tan pronto como salió de la cárcel tomó las riendas de la familia, y logró imponer su voluntad cuando se trató de elegir al nuevo líder, explicó a la prensa el fiscal de Palermo, Francesco Lo Voi.
La patrona fue arrestada el martes por la mañana, junto con otras 24 personas, en una operación en la que participaron más de 200 carabineros, varios helicópteros y equipos de perros. Di Trapani fue acusada de asociación mafiosa, extorsión e intento de extorsión, acusaciones que revelan, según los carabineros, su capacidad de intimidación.
En el año 2000 la mujer logró concebir un hijo con su marido a pesar de las draconianas condiciones de detención de este último. En 2007 la administración penitenciaria se negó a ayudarla a tener un segundo hijo por inseminación artificial.