La Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA) cerrará a partir de enero próximo su oficina en Carcas ante la inestabilidad política y el deterioro de la situación social y económica, anunció la organización.
El vicepresidente regional para las Américas de la IATA, Peter Cerdá, explicó a los medios que el cierre se producirá el 31 de enero a raíz de la inestabilidad en Venezuela, que tiene un impacto en la comunidad empresarial.
Por esta situación solo 6 aerolíneas de la IATA siguen operando en Venezuela frente a las 24 que había en el país en 2014. Según Cerdá, el tráfico internacional ha descendido un 65% desde su punto álgido en 2013 y más del 69% de los vuelos de las aerolíneas miembros de la IATA han sido cancelados. A esto se suma que el gobierno del Presidente Nicolás Maduro sigue bloqueando la repatriación de US$3.800 millones de fondos de la industria, recalcó Cerdá.
La IATA, que no tiene grandes esperanzas de mejora en Venezuela, operará a partir de febrero desde Panamá para apoyar a las aerolíneas que permanecen en Venezuela, la industria aérea más amplia y a los viajeros venezolanos. Mientras, las operaciones cubanas que previamente se gestionaron desde Caracas, se trasladarán a la oficina de la IATA en Miami (EE.UU.), responsable de las relaciones con el Caribe.