La escalada verbal entre Corea del Norte y Estados Unidos continúa el lunes y alcanzó un nuevo piso luego de que Pyongyang dijera que Washington le había “declarado la guerra” y que estaba en su derecho a responder ante las amenazas.
Sin embargo, el gobierno estadounidense negó dichas acusaciones y advirtió que el régimen de Kim Jong-un no tiene derecho a disparar contra sus aviones si se encuentran sobre aguas internacionales.
“No hemos declarado la guerra a Corea del Norte, y francamente, sugerir eso es absurdo”, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, en una conferencia de prensa. “Nunca es apropiado que un país dispare contra las aeronaves de otro país cuando se encuentran sobre aguas internacionales”, añadió.
En tanto, una portavoz del Departamento de Estado, Katina Adams, indicó que “ningún país tiene derecho a disparar sobre las aeronaves o barcos de otro país en espacio aéreo internacional o aguas internacionales”.
Estas aclaraciones llegan luego de los dichos del ministro norcoreano de Exteriores, Ri Yong-ho, quien desde Nueva York señaló que se reserva “el derecho a derribar bombarderos estratégicos estadounidenses aunque no estén dentro del espacio aéreo” de Corea del Norte.
Ri también acusó al presidente estadounidense, Donald Trump, de haber “declarado la guerra” a Corea del Norte durante su discurso de la semana pasada ante la Asamblea General de la ONU, en la que el líder norteamericano amenazó con “destruir totalmente” al país asiático.