“El viejo statu quo peronista fue arrasado en casi todo el país”. Con esas palabras, el columnista político argentino Joaquín Morales Solá graficó lo ocurrido la jornada del domingo en las elecciones primarias legislativas de Argentina, donde el oficialismo de Mauricio Macri se impuso a nivel nacional, dejando atrás al peronismo, fraccionado en distintos conglomerados.
Y al parecer, así lo confirman los resultados preliminares, que muestran a nivel nacional un triunfo del oficialista Cambiemos con el 35,9% de los votos. Le sigue el kirchnerismo, que se distanció del peronismo y que tiene como emblema a Cristina Fernández, con el 20,34%. En tercer lugar se ubica el tradicional Partido Justicialista (bastión peronista), con el 17,09%.
Y haciendo el desglose, los resultados reflejan un triunfo de la coalición de Macri en los cuatro principales distritos nacionales: Córdoba, Santa Fe, Capital Autónoma de Buenos Aires y Mendoza. Además, luchaba palmo a palmo en la provincia de Buenos Aires, donde Esteban Bullrich se imponía por un estrecho margen a Cristina Fernández.
También se destacan hechos como la derrota de los hermanos Rodríguez Saá en San Luis después de casi 34 años de un gobierno personalista, feudal y autoritario, según afirma Morales Solá.
Así, en su columna publicada este lunes por el diario La Nación de Argentina titulada La caída del viejo orden peronista, el analista asegura que el liderazgo político de la tradicional coalición se extinguirá sin remedio en medio de escandalosas investigaciones sobre la corrupción de su gobierno.
Mauricio Macri se recibió anoche de político exitoso, porque él comprendió, en medio de la ruina nacional que heredó, el estado real de la sociedad argentina. O influyó para que la gente común comprendiera que el atajo populista es un camino que conduce a la nada, asegura.
La predecible interna peronista, que será intensa como todas las luchas internas peronistas, ampliará los márgenes de Macri para meterse con las cuestiones de fondo del conflicto argentino. La economía, el déficit y la pobreza en un mundo que cambia drásticamente Joaquín Morales Solá se pregunta entonces si ¿Es Macri el que lideró ese cambio? ¿O es la sociedad la que está impulsando el cambio de Macri?
El mérito de Macri reside en que fue él quien advirtió la enorme fatiga de la sociedad argentina después de 25 años de gobiernos peronistas, que recurrieron al derroche de casi todos las reservas del país, terminaron con cualquier noción de institucionalidad y culminaron la faena con dos fracasos consecutivos. Uno en nombre de la derecha y otro en nombre de la izquierda. Menem y los Kirchner, agrega el columnista.
Así, Morales Solá afirma que, con su fórmula, el Mandatario argentino es al fin y al cabo, el auténtico heredero de la crisis de 2001, el que ocupa el lugar vacante después del 'que se vayan todos'. No obstante, también personaliza este triunfo del macrismo en dos personas más: la gobernadora de Buenos Aires María Eugenia Vidal y la diputada Elisa Carrió, férrea opositora al kirchnerismo.
Ambas políticas son las dos personas más populares del país, según Morales. En el caso de Vidal, se hizo cargo de la campaña bonaerense con su estilo de persona común, que le habla de las cosas comunes a la gente común, mientras que Carrió ”barrió en la Capital, pero hizo una campaña nacional (sobre todo en Buenos Aires y Santa Fe) en la que desplegó el magnetismo de su carisma.
Hay que detenerse en ese país todavía económicamente desigual para advertir que ayer prevalecieron valores más perdurables que la contingencia económica. La recuperación de la economía no les llegó todavía a todos los argentinos y menos aún a los que habitan el pobre conurbano bonaerense. Pero, como dice Vidal, nadie mejor que el pobre sabe cuánta mentira hubo en los últimos años, cuando hablaban del paraíso kirchnerista y se negaban a contar el número de pobres, agrega Morales.
Anoche, el peronismo quedó diezmado. Julio Bárbaro concluyó que Cristina Kirchner había logrado destruir el peronismo y el kirchnerismo al mismo tiempo. Cristina Kirchner exhibió ayer su desgaste después de estar en el primer plano político durante los últimos 14 años. Tal vez Bárbaro haya sido demasiado dramático, pero lo cierto es que sólo el salteño Juan Manuel Urtubey, entre los peronistas conocidos y presentables, logró sobrevivir. La caída del gobernador cordobés, Juan Schiaretti, tumbó también al único amigo que Macri tiene en la liga de gobernadores peronistas, explica.
Así, Morales Solá vaticina que la predecible interna peronista, que será intensa como todas las luchas internas peronistas, ampliará los márgenes de Macri para meterse con las cuestiones de fondo del conflicto argentino. La economía, el déficit y la pobreza en un mundo que cambia drásticamente”.