El futbolista argentino retirado Diego Maradona, en Cuba para los funerales de su amigo y ex líder revolucionario Fidel Catro, postuló que si el pueblo de su país decide salir a la calle, el presidente Mauricio Macri podría no estar en el cargo en Navidad.
Me siento cubano, dijo Maradona en la televisión local al aterrizar para participar este fin de semana en el funeral de su segundo padre. Explicó que me parece que el mundo ha perdido a su líder, hoy puede haber muchos jugadores, pero él era el dueño del equipo, el equipo mundial de políticos. En Sudamérica, o en Europa si querés, no hay Ningún líder carismático como él ni nadie que pueda resolver lo que él resolvía, dijo.
Maradona tiene la imagen de Castro tatuada en su cuerpo así como la del socio revolucionario de Fidel, el argentino Ernesto Che Guevara. Al enterarse del fallecimiento de Fidel, Maradona optó por quedarse en Zagreb, Croacia, en apoyo del equipo de la Copa Davis de su país, que consiguió la Copa Davis de 2016 y voló a La Habana después.
Fidel no es sólo de los cubanos, un argentino lo dice, sostuvo. La relación entre Diego y Fidel data de los años ochenta. La última visita del argentino a Castro fue hace tres años. El entonces presidente cubano brindó asistencia médica a Maradona para superar sus problemas de adicción en 2004. Al año siguiente Maradona entrevistó a Fidel en su programa de televisión La Noche del 10”.