En un discurso el jueves en el Palacio del Eliseo, François Hollande reconoció que había cometido errores y que no se postularía para un nuevo mandatocomo presidente de Francia.
He decidido que no seré un candidato, dijo. Hollande también enumeró los errores y éxitos de los años en el poder. La decisión de Hollande despeja el camino para que el actual primer ministro, Manuel Valls, recoja la espada socialista y desafíe a derechista François Fillon y a la ultraderechista Marine LePen.
Durante su discurso, Hollande también abordó el tema de un proyecto de ley para despojar a los involucrados en actos de terrorismo de su nacionalidad francesa. Pensé que iba a acercarnos más, pero en cambio eso nos dividíó más”, explicó.
Durnte la presidencia de Hollande, Francia se ha convertido en un blanco fácil para el terrorismo en los últimos años. Las encuestas muestran que la gente teme que si la presidencia permanece en manos de los socialistas, es poco probable que cambie esa situación y, por lo tanto, las posibilidades reales de Hollande de ser reelegido eran prácticamente inexistentes.