Los vuelos directos de Estados Unidos a La Habana podrán comenzar a partir de “este otoño (primavera)” desde diez ciudades, informó este jueves el Departamento de Transporte del país norteamericano
Las ciudades son: Atlanta (Georgia), Charlotte (Carolina del Norte); Fort Lauderdale, Orlando, Miami y Tampa (Florida); Houston (Texas), Los Ángeles (California), Newark (Nueva Jersey) y Nueva York. Las aerolíneas con licencias para operar estas rutas son ocho: Alaska Airlines, American Airlines, Delta Airlines, Frontier Airlines, JetBlue Airways, Southwest Airlines, Spirit Airlines y United Airlines, agregó el Gobierno estadounidense en un comunicado.
“Tratamos de seleccionar áreas con una sustancial población cubano-estadounidense, así como importantes puntos de conexión aérea”, señaló un funcionario estadounidense. Desde que se restablecieron las relaciones diplomáticas entre ambos países en julio de 2015, agregó, las visitas de estadounidenses a Cuba se han incrementado en un 77%.
En febrero de este año, las autoridades estadounidenses y cubanas acordaron restablecer los vuelos entre ambos países por primera vez en 50 años. “Restaurar un servicio regular aéreo supone un tremendo potencial para reunir a las familias cubano-estadounidenses e impulsar la educación y las oportunidades para las empresas de todos los tamaños”, subrayó el secretario de Transporte de EE.UU., Anthony Foxx, en el citado comunicado. Las ochos aerolíneas podrán llevar a cabo un total de 20 vuelos diarios a La Habana.
El mes pasado, Washington anunció las licencias para operar vuelos entre cinco ciudades estadounidenses (Miami, Fort Lauderdale, Chicago, Minneapolis y Filadelfia) y nueve destinos en Cuba sin incluir la capital (Camagüey, Cayo Coco, Cayo Largo, Cienfuegos, Holguín, Manzanillo, Matanzas, Santa Clara y Santiago de Cuba).
El inicio de los vuelos regulares entre Cuba y EE.UU. facilita los viajes para los estadounidenses que entren dentro de las doce categorías en las que se permiten las visitas a la isla, adonde todavía no pueden entrar como turistas. Sin embargo, aún sigue vigente el embargo comercial y la prohibición del turismo a la isla, que solo se pueden levantar con la autorización del Congreso estadounidense.