La producción de soja en la Argentina será de 55 millones de toneladas, casi 7% por debajo de la estimación de inicio de campaña, como consecuencia de las pérdidas derivadas de las inundaciones y el temporal que afectó a buena parte del área productiva durante abril último.
El cálculo fue dado a conocer por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), que detalló que desde su estimación de marzo, de 59 millones de toneladas, las pérdidas llegan a 4 millones de toneladas. Pero enfatiza que el evento climático se llevó 5,7 millones de toneladas de producción por las pérdidas directas, la baja en la calidad de los cultivos y los retrasos en la recolección, que generan una baja en los rendimientos.
Como contrapartida, indicó que afortunadamente habría un aumento en la producción estimada en la provincia de Buenos Aires, que produciría 21 millones de toneladas, 2 millones más que lo previsto el mes pasado.
El Ministerio de Agroindustria, a su turno, coincidió con los pronósticos de recorte. Sostuvo que según sus cálculos, hay 1,2 millón de hectáreas que quedarán sin cosechar, lo que sumado a mermas de rendimiento y bajas de calidad, representa una pérdida de casi 6 millones de toneladas.
Las pérdidas en la cosecha sojera local, por el temporal de más de 20 días de abril, impactaron en las cotizaciones internacionales de la oleaginosa, que saltaron 18% desde principios de abril hasta el 10 de mayo, cuando el contrato más activo alcanzó el mayor valor en 18 meses, tras superar los u$s 400 la tonelada.
Desastre pluvial sean ,tal vez, los términos que mejor describen a abril de 2016”, enfatizó el trabajo de la Guía Estratégica del Agro (GEA) de la entidad rosarina, en el que calculó que más del 56% de las pérdidas en volumen se dan en la provincia de Santa Fe, donde estimó una retracción en la producción sojera de 3,2 millones de toneladas. En tanto, le restó 1,5 millón de toneladas a la producción en Entre Ríos, y otro millón para la de Córdoba.
Según la BCR, la pérdida en volumen y en caída de rindes, además implica una caída de US$ 2.200 millones en exportaciones sojeras totales, de las cuales más de US$ 1.240 millones corresponden a Santa Fe.
El trabajo resalta, además, que el avance de la cosecha cubrió 45% del área sembrada en la zona núcleo, cuando a esta altura del año pasado ya se había recolectado más del 80% de los cuadros.
El retraso en la cosecha de soja también esta demorando las tareas en la recolección de maíz, lo que podría derivar también en pérdidas para el cereal aunque no de la magnitud evidenciada en la oleaginosa, por lo que la entidad rosarina mantuvo en 25 millones de toneladas su previsión de producción total del cereal.