Además de mantener la proyección de -8% para el PIB de Venezuela este año, el Fondo Monetario Internacional estima que la inflación del país gobernado por Nicolás Maduro crezca 481% en este periodo.
Si bien la cifra es mucho menor al 720% estimado en enero pasado, también es menos de un tercio de lo esperado para 2017: un aumento de los precios de los productos récord de 1.642%.
Venezuela seguirá sufriendo una profunda recesión en 2016, en medio de la incertidumbre política en un momento en que los nuevos retrocesos del precio del petróleo han recrudecido los desequilibrios y las presiones macroeconómicas, incluida una tasa de inflación promedio que rozaría 500% en 2016, detalló el FMI en su informe.
Venezuela está experimentando una crisis económica muy grave. Esto no es una recesión, es una depresión, dijo Francisco Rodríguez, economista jefe para la región de Bank of America- Merrill Lynch.
El FMI también prevé que el país liderado por Nicolás Maduro -que rara vez publica sus propios datos económicos- tendrá una tasa de desempleo de 17% este año y casi un 21% el próximo año, y no descarta que se encuentre en la antesala de la hiperinflación.
La inflación ha sido un gran problema permanente en Venezuela. En enero, el Gobierno dijo que la inflación aumentó un 141% en el año finalizado en septiembre. Eso significa que los precios de todos los tipos de bienes, como la leche, el azúcar y la harina, se han disparado. Es más los bienes básicos como el papel higiénico y el jabón son tan escasos que algunos hoteles están pidiendo a los huéspedes llevar los suyos.
El valor de la moneda de Venezuela también va por un camino oscuro. En el cambio del mercado negro, un dólar es igual a 1.125 bolívares. Hace un año, un dólar equivalía a 258 bolívares.