El diputado y médico brasileño Osmar Terra dijo este lunes que la situación actual por el virus del Zika es alarmante y señaló que “tal vez” esta pueda llegar a ser la “peor epidemia” del último siglo en el país.
Es un tema extremadamente preocupante. Tal vez sea la peor epidemia que hemos visto en los últimos cien años, porque no se trata solo de una lesión temporal, sino que son lesiones definitivas en los fetos que se están desarrollando”, dijo en un debate Terra, coordinador de la comisión de la Cámara de Diputados que acompaña las acciones ante el zika y la microcefalia.
El virus del Zika circula actualmente en gran parte de países de América y, si bien causa síntomas leves entre la mayor parte de infectados, el gran temor tiene que ver con su probable relación con casos de microcefalia y el síndrome neurológico de Guillain Barré.
El debate, titulado “La mujer y los efectos del zika en la salud y plenitud de sus derechos”, fue organizado por la Asociación de Magistrados de Río de Janeiro (Amaerj) y tuvo lugar en la Dirección General de Justicia en Río de Janeiro.
Frente a una considerable cifra de niños naciendo “con deficiencias severas por cuenta de la microcefalia”, que no para de crecer y que amenaza con llegar a los “centenas de millares”, Terra aseguró que Brasil afronta un “drama humano, familiar y social” y apuntó que será necesaria “una gama de recursos públicos gigantescos para que los niños y sus familias sean amparados”.
Un tema que no tardó en aparecer durante la ponencia fue el aborto, una medida no aceptada todavía en estas situaciones por el Ministerio de Salud brasileño y que está generando, explicaron, un aumento en el número de abandonos de bebés con esta malformación.
“Estamos detectando un movimiento social de padres que abandonan a las familias y de madres que abandonan a sus hijos por haber nacido con esa condición (microcefalia). Tenemos que pensar, reflexionar y debatir esa cuestión que es muy delicada”, dijo la jueza y directora del Departamento de Derechos Humanos y Protección Integral de la Amaerj, Márcia Sutti.
Tras esta afirmación, la jurista recordó que esta cuestión “será llevada al Tribunal Supremo”.
Los ponentes destacaron también la importancia de un proyecto lanzado la semana pasada en el estado de Río de Janeiro dirigido a la acogida de niños con microcefalia y embarazadas con zika.
Este proyecto, el primero de este tipo lanzado en Brasil, fue defendido por su utilidad, pero Terra aseguró que no era suficiente. “Es un proyecto válido para capacitar la red de salud de Río, pero tiene que ampliarse el número de neuropediatras, fisioterapeutas y estimular la formación de ellos para dar cuenta del mensaje”, dijo.