Los presupuestos alemanes lograron en 2015 un superávit de 19.400 millones de euros (21.427 millones de dólares), un 0,6% del PIB, el más grande en términos absolutos desde la reunificación en 1990, informó la Oficina Federal de Estadística, que corrigió ligeramente al alza una primera estimación que hizo en enero con base en cifras provisionales.
En relación con el PIB, en 2000 hubo un superávit más alto, del 0,9% del PIB, pero en términos absolutos ese año estuvo por debajo de 2015 con 18.200 millones de euros (20.000 millones de dólares).
Además, el superávit de 2000 obedeció al efecto especial que tuvo la subasta de licencias de telefonía móvil que le proporcionó al Estado ingresos extraordinarios.
Los cálculos del superávit incluyen los presupuestos del Estado, así como los de los 16 estados federados y otras administraciones públicas.
Con ello, Alemania cumple ampliamente el criterio del tratado de Maastricht que exige que el déficit de las administraciones públicas no puede estar por encima del 3% del PIB.
La última vez que Alemania no cumplió con ese criterio fue en 2010 cuando el déficit fue del 4,2% del PIB.
En el último trimestre de 2015 la economía alemana creció un 0,3% con respecto al trimestre anterior. En todo 2015 el crecimiento fue del 1,7% después del 1,6% que se había registrado en 2014.