La declaración fijada para el miércoles del ex-presidente brasileño Lula da Silva para responder por presunto lavado de dinero fue suspendida la noche del martes por un órgano que supervisa a las fiscalías.
La decisión del Consejo Nacional del Ministerio Público -divulgada por el Partido de los Trabajadores (PT) de Lula- suspendió la cita en que el ex mandatario debería responder como investigado a las preguntas de la fiscalía de Sao Paulo sobre la supuesta propiedad de un apartamento tríplex en la costa paulista.
Lula y su esposa Marisa son investigados “por lavado de dinero que incluye el delito de ocultamiento de patrimonio”, según la fiscalía.
Según el Consejo, la declaración de Lula se suspendió a petición de un diputado del PT que cuestionó la actuación del fiscal encargado Cassio Conserino, quien declaró a la prensa que habría “indicios” para acusar a Lula aún cuando el proceso está recién en fase de recopilación de pruebas.
El objeto de esta investigación es un apartamento tríplex en el balneario paulista de Guarujá que la fiscalía sospecha pertenece a Lula pero que oficialmente aparece como posesión de la constructora OAS, una de las firmas involucradas en el mega-fraude a Petrobras que es investigado en otro proceso.
Lula declaró en 2006 haber pagado una cuota para este proyecto inmobiliario en la Bancoop, la cooperativa de bancarios que era propietaria de esta obra, y que finalmente, por inviabilidad, fue transferida a OAS. La defensa del ex presidente afirma que Lula finalmente desistió de la compra y pidió la devolución del pago.
En paralelo, investigadores del caso Lava Jato que intenta desmadejar el mega-fraude en Petrobras sospechan que OAS habría entregado apartamentos del mismo desarrollo inmobiliario en Guarujá en pago de sobornos a cambio de contratos con la petrolera.