El canciller brasileño, Mauro Vieira afirmó que “no se puede juzgar a priori” lo que sucederá en las elecciones legislativas en Venezuela y dijo confiar en que la misión de “acompañamiento” de la Unasur trabajará con plenas libertades.
El ministro compareció ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado y fue preguntado sobre la intención del presidente electo de Argentina, Mauricio Macri, de solicitar al Mercosur la aplicación de la “cláusula democrática” del bloque a Venezuela por la alegada faltas de libertades en ese país.
Vieira no respondió directamente a esa pregunta y enmarcó todo el asunto en las elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre en Venezuela, de cara a las cuales la oposición ha denunciado diversas irregularidades, como los vetos a muchos de sus candidatos.
“Tenemos que esperar el resultado de las elecciones”, insistió el canciller, quien aseguró que el Gobierno venezolano se comprometió a darle amplias libertades al trabajo de la misión de “acompañamiento” de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) para esos comicios.
Según Vieira, tanto el Gobierno venezolano como la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) coinciden en que la salida a todo el conflicto político en ese país debe darse por la vía electoral, por lo que es necesario esperar a que hablen las urnas.
El presidente de la comisión parlamentaria, el senador opositor Aloysio Nunes, criticó frente al canciller diversas declaraciones del presidente venezolano, Nicolás Maduro de quien dijo que ha afirmado que en caso de que el Gobierno pierda las parlamentarias gobernaría con “los militares”.
Según el parlamentario, “hay una escalada verbal” por parte de Maduro y “la amenaza de una turbulencia inaudita, que hasta pudiera llevar a un baño de sangre” en caso de irregularidades, ante las cuales Brasil y el Mercosur “no pueden seguir en silencio”.
El canciller insistió en subrayar su confianza en la misión de la Unasur, que está encabezada por el ex presidente dominicano Leonel Fernández, y garantizó que Brasil participa “en todos los esfuerzos para promover un diálogo y un entendimiento en Venezuela”.
También dijo que muchas veces lo hace mediante una “diplomacia reservada o silenciosa”, mediante la cual ya le ha expresado a las autoridades de Venezuela el deseo de que “las elecciones sean un clima de paz, de transparencia y libertades”.
Vieira también negó que el ex ministro brasileño Nelson Jobim, propuesto para encabezar la misión de Unasur que finalmente dirigirá el ex presidente dominicano, cuyo país no es miembro de ese mecanismo regional, haya sido vetado por las autoridades venezolanas.
Ese supuesto veto y la demora de Venezuela en responder a una serie de garantías exigidas por algunos países de Unasur llevaron a la corte electoral de Brasil a desistir de integrar la misión del organismo para los comicios parlamentarios.
Sin embargo, el canciller reiteró que “ni la Unasur ni Venezuela ni ningún otro país” vetaron a Jobim, quien figuraba en una lista de posibles candidatos en la que dijo que había “otros cuatro nombres”.
“No sé cómo surgió” esa información o si “fue un rumor”, pero en el momento en que se habló del supuesto veto “todavía no se discutía el nombramiento” del jefe de la misión de Unasur, afirmó Vieira.