La jueza federal de San Isidro y ex esposa de Alberto Nisman, Sandra Arroyo Salgado, dio a conocer este jueves los resultados de los peritajes de la querella en la causa por la misteriosa muerte del ex fiscal del caso AMIA y aseguró que Nisman “fue víctima de un homicidio y además resaltó que el cuerpo fue movido” luego de la muerte.
El informe descarta con contundencia las hipótesis del accidente y del suicidio, aseguró Arroyo Salgado. Alberto Nisman fue víctima de un homicidio, insistió la jueza durante la presentación.
La jueza convocó a una conferencia de prensa en el viejo Consejo Deliberante de la localidad de San Isidro, de la que también participaron el perito forense Osvaldo Raffo, el perito Julio Ravioli, el Licenciado en Criminalística Daniel Salcedo y el abogado defensor Germán Carlevaro.
Entre otras cuestiones, Arroyo Salgado destacó que, según los peritajes de estos expertos, el cuerpo de Nisman fue movido luego de su muerte, que el arma hallada en el lugar es la que se utilizó para el disparo, y que no existió espasmo cadavérico.
Al comenzar la conferencia, la jueza agradeció la presencia de los medios. Fue muy doloroso para todos nosotros llevar adelante este trabajo, dijo. Y aclaró que la única condición que este equipo de expertos le puso fue que se respetara sin condicionamiento alguna la búsqueda de la verdad científicamente comprobable a partir de la evidencia física,
No soslayo que la muerte violenta de Alberto Nisman ha impactado de lleno en la institucionalidad de la república, además de poner en tela de juicio el rol del Estado ante la comunidad internacional en materia de terrorismo, señaló la jueza. Pero aclaró: Esta querella no busca un resultado determinado. Lo único que buscamos es la verdad objetiva y científicamente comprobable.
El informe se basó en el análisis de las fotos y videos tanto de la autopsia como del lugar del hecho, así como también en los estudios complementarios llevados a cabo en la investigación. Este informe ya fue presentado ante la fiscal Viviana Fein, a cargo de la causa.
La muerte de Nisman es un magnicidio que merece respuestas de parte de las instituciones de la república, señaló la jueza.
Como familiar y como parte de la justicia anhelo que el informe forense que tanto trabajo dio sea el hito fundacional a partir del cual la investigación encuentre el cauce que hoy no tiene, concluyó Arroyo Salgado tras la lectura de las conclusiones.
La pistola Bersa modelo 62 calibre 22 presenta signos de haber sido disparada y la pericia indica irrefutablemente que fue el arma usada en el hecho.
Las pericias de barrido microscópico dieron negativo (no se encontraron restos de pólvora en las manos del fiscal).
La pericia toxicológica demostró la presencia de cafeína en cantidades no determinables, y alcohol de contenido gástrico compatible con una mínima ingesta alcohólica o la fermentación natural de alimentos ingeridos.
Los trascendidos de que estaba alcoholizado no son certeros, sostuvo la jueza.
Se afirmó en la autopsia oficial que el cadáver de Nisman presentaba espasmo cadavérico en la mano derecha, lo que induciría a pensar en suicidio, pero podemos afirmar con certeza que ese signo no existió
La agonía es incompatible con la aparición de este signo [el espasmo cadavérico] y Nisman tuvo agonía, objetivamente demostrada por la copiosa hemorragia externa
La posición en que fue encontrado el cuerpo no fue la final. El cuerpo ha sido movido
La data de muerte es de 36 horas, más menos cuatro horas, a partir del inicio de la autopsia
”La trayectoria (del disparo) de derecha a izquierda de abajo hacia arriba y de atrás hacia adelante”.