El ex Presidente de Brasil Fernando Henrique Cardoso abogó por una alianza entre el socialdemócrata Aécio Neves y la ambientalista Marina Silva para evitar la reelección de la actual Mandataria, Dilma Rousseff, en las próximas elecciones generales del domingo
En una entrevista que publica este viernes el diario O Estado de Sao Paulo, Cardoso, quien gobernó Brasil entre 1995 y 2002, afirmó que, si las urnas del domingo no le aseguran a Rousseff la reelección, el candidato opositor derrotado deberá aliarse al que logre avanzar a la segunda ronda, que se realizará el 26 de octubre.
Si hay segunda vuelta -y creo que va a haber-, necesariamente los que están en la oposición tendrán que apoyar unos a los otros, expresó el principal líder del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), de Neves.
Según Cardoso, Marina Silva es la que más necesitaría el apoyo del PSDB, para demostrar que tiene capacidad de gobernar, aliándose a otros.
Aécio no necesita demostrarlo, porque su partido ya gobernó, argumentó el ex Presidente, quien sin embargo admitió que, de lograr alcanzar la segunda ronda, su candidato necesitará el apoyo de los electores de Silva para derrotar a Rousseff.
”Creo que los electores de los dos lados se unirán, independientemente de las decisiones de los dirigentes. Pero, para transmitir más firmeza y demostrar poder de gobernar, es necesaria también una decisión de los dirigentes. El PSDB tiene que decir de qué lado está. Estaremos eligiendo a gobernadores, una representación (en el Congreso), y toda esta gente tendrá que manifestarse, expresó.
El ex gobernante admitió, por otra parte, que si Neves no logra superar a Silva en la lucha por el segundo lugar ello representará un golpe para el PSDB, que desde 1994 siempre ha sido protagonista de las elecciones presidenciales.
Ello nos quitaría esa posibilidad de polarizar el debate político de ideas en este momento y, posiblemente, hará más difícil la reelección de nuestros gobernadores que pasen a la segunda vuelta, dijo.
Por otra parte, Cardoso dejó clara su admiración por Marina Silva, al tildar de infamia” las acusaciones del Partido de los Trabajadores (PT) de Rousseff, que afirman que la ambientalista gobernará para servir a los ricos, y no a los pobres.
Es una gran infamia, porque Marina es pobre, negra, viene de la foresta y siempre fue una luchadora. Es necesaria mucha propaganda para estigmatizarla como agente del capital financiero, expresó.
Cardoso también minimizó el hecho de que Silva integró el PT por más de dos décadas, antes de abandonar el partido, por el que fue incluso ministra de Medio Ambiente del gobierno de Lula da Silva (2003-2010): Yo valoro más el hecho de que ella haya dejado de ser (petista”)”.