Durante julio, la inflación alimentaria de América Latina y el Caribe alcanzó 0,7%, en tanto la inflación general fue de 0,6%, señaló hoy la FAO. Se trata de un incremento de 0,2 puntos porcentuales respecto de la cifra registrada en junio, pero continua siendo una tasa inferior a las registradas en los meses de abril y mayo.
El Informe mensual de precios señala que el precio de productos como el limón, el queso y el huevo cayeron en varios países de la región. Por el contrario, el tomate, la cebolla y la papa fueron los alimentos que impulsaron la inflación de algunos países de América Latina y Caribe.
Durante julio, Costa Rica presentó una inflación alimentaria de 0,8%, esto es una reducción de 0,2 puntos porcentuales en comparación con el mes previo.
Nicaragua y Panamá registraron notables descensos en su inflación alimentaria respecto al mes de junio. En Nicaragua la inflación alimentaria cayó desde un 2,9% en junio a un 0,7% en julio, mientras que en Panamá pasó desde un 0,9% a una tasa negativa de 3,1% en igual período.
El Salvador, Guatemala, Honduras, Haití, México y República Dominicana registraron leves aumentos en sus tasas de inflación, tanto alimentaria como general. En El Salvador y Honduras la inflación alimentaria fue de 1,6%, en Guatemala ésta registró una tasa de 1,4%, en Haití y República Dominicana fue de 0,7% y en México la inflación alimentaria fue de 0,4%.
De los países monitoreados en América del Sur durante el mes de julio, Bolivia, Brasil y Paraguay presentaron menores tasas de inflación tanto alimentaria como general en comparación con el mes previo.
Tanto Brasil como Paraguay presentaron tasas de inflación alimentaria negativas por segundo mes consecutivo, con tasas de – 0,2% y -1% respectivamente.
Bolivia, por su parte, registró importantes reducciones en sus tasas de inflación observándose una inflación alimentaria de 1,5% y general de 0,7% durante el mes.
Tanto en Chile como en Perú la inflación alimentaria registró un alza de 0,6 puntos porcentuales en comparación en el mes previo, con tasas de 0.9% y 0.8% respectivamente. En Colombia y Ecuador la inflación alimentaria paso de tasas negativas a positivas registrando valores de 0,4% y 0,7% respectivamente.