El gobierno argentino aseguró que no habrá sanción para la filial local del Citibank siempre que cumpla “con las normas argentinas”, después de que esta semana fuese revocado el permiso para operar al Bank of New YorK-Mellon (BoNY), otro de los agentes fiduciarios del conflicto de la deuda.
El ministro de Economía, Axel Kicillof, afirmó que la filial local del Citibank “no va a ser pasible de ninguna sanción” si cumple con las normas argentinas y recalcó que quien ejerce la actividad regulatoria en esta área es el Banco Central.
“En tanto cumpla las normas argentinas, no va a ser pasible de ninguna sanción”, insistió Kicillof, durante una rueda de prensa en la que Argentina celebró la decisión del G77+China de pedir a las Naciones Unidas un debate para establecer un marco de normas internacionales sobre los procesos de reestructuración de la deuda soberana.
El “incumplimiento regulatorio de parte del Citibank de Argentina es algo que tiene que resolver el Banco Central”, recalcó Kicillof, para zanjar los rumores que colocaban al Citibank en el punto de mira del Ejecutivo de Cristina Fernández tras la inhabilitación para operar al BoNY.
El Banco Central argentino revocó el martes pasado la representación del BoNY en el país por el incumplimiento de sus obligaciones para desarrollar la actividad, ya que no tiene operaciones activas vigentes desde diciembre de 2012 y no financia a residentes desde 2013, según la resolución emitida por el organismo.
El Bank of New York-Mellon es uno de los agentes fiduciarios establecido por los contratos de los canjes de 2005 y 2010 para intermediar en el pago bonistas de deuda reestructurada que recientemente se vieron afectados por el bloqueo impuesto por el juez neoyorquino Thomas Griesa.
Argentina considera que tanto el BoNY como el resto de agentes fiduciarios, entre ellos Citibank, incumplen las obligaciones que tienen por contrato al acatar la orden de Griesa y no derivar a los acreedores los fondos depositados por el Gobierno en el último vencimiento.