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Comienza debate en Chile sobre las dos grandes leyes del gobierno de Bachelet
La presidenta chilena armó una coalición amplia, incluyendo a líderes estudiantiles, con la promesa de una educación libre y gratis 
Según la oposición el proyecto de reforma electoral es desprolijo pero además una 'cortina de humo' para los cambios fiscales La oposición conservadora chilena aseguró que el proyecto para reformar el sistema electoral que presentó esta semana el Gobierno de la presidenta, Michelle Bachelet, es una “cortina de humo” para desviar la atención de la reforma tributaria que se tramita en el Congreso.
Los diputados José Manuel Edwards, de Renovación Nacional (RN), y Arturo Squella, de la Unión Demócrata Independiente (UDI), criticaron en una rueda de prensa el proyecto para modificar el sistema electoral, que contempla un aumento del número de parlamentarios, y aseguraron que no cumple ninguno de los objetivos propuestos.
“Lo que está ocurriendo por parte del Gobierno no es un interés de mejorar el sistema electoral, es simplemente que estaban perdiendo la batalla de la reforma tributaria y tiran una cortina de humo para no seguir perdiendo la popularidad”, dijo Edwards.
El diputado de la UDI consideró que la opinión pública se ha dado cuenta de que algunos puntos de la reforma tributaria afectarán a la clase media y no a la población de mayores ingresos.
La actualidad política chilena ha estado dominada en las últimas semanas por dos importantes proyectos impulsados por el Gobierno de Bachelet y que han provocado críticas y reparos de la oposición y de algunos sectores oficialistas.
Por un lado la reforma tributaria, que se discute en el Congreso y cuyos puntos principales son un alza al impuesto de las grandes empresas de un 20 % a un 25 % en un plazo de cuatro años y la eliminación de un incentivo que permitía a las compañías tributar sólo por las ganancias retiradas en lugar de las devengadas.
Y el otro proyecto es el que busca reemplazar el sistema electoral bi-nominal vigente en el país por uno proporcional, que propone crear más distritos y circunscripciones. La iniciativa contempla además aumentar de 120 a 155 el número de diputados y de 38 a 50 el de senadores, y fijar un esquema de cuotas para que al menos un 40 % de los postulantes al Congreso sean mujeres.
El diputado Squella, de la UDI, dijo que tal y como está planteada, la reforma electoral dificulta la incorporación de listas de candidatos pequeñas y a los independientes.
“Para un candidato independiente fuera de un pacto (…) es casi imposible ganar. Si hoy ya era difícil, en una lógica bi-nominal, es prácticamente imposible para una candidatura independiente salir elegida”, sostuvo.
Pese a las críticas, los diputados dijeron estar dispuestos a reformar el sistema electoral y anunciaron que los partidos de la Alianza, la coalición opositora formada por RN y la UDI, trabajarán en una propuesta conjunta.
