El Senado paraguayo aprobó la expropiación de 14.400 hectáreas de tierra ocupada por un empresario alemán para devolvérselas a una comunidad indígena, como sentenció la Corte Interamericana de Derechos Humanos en 2006, con lo que el proyecto de ley pasa ahora a la Cámara baja.
Los legisladores dieron el visto bueno a la propuesta de forma mayoritaria, con el apoyo de las bancadas tanto de derecha como de izquierda, en una votación a mano alzada.
La ONG local Tierraviva, que llevó el caso a la Corte Interamericana, consideró que la aprobación del proyecto es un hecho “histórico” para los indígenas paraguayos.
La comunidad Sawhoyamaxa, perteneciente al pueblo Enxet, oriundo del Chaco Paraguayo (noroeste), lucha desde hace 23 años por recuperar las tierras de las que fueron expulsados por el terrateniente de origen alemán Heribert Roedel, que posee en la zona cerca de 60.000 hectáreas, según Tierraviva.
“Es un día especial para nosotros, hemos recorrido 23 años de lucha y de reclamar. Varios miembros de la comunidad fallecieron por el camino, no aguantaron la lucha”, dijo Leonardo González, uno de los líderes de la comunidad, frente al edificio del Congreso antes del inicio de la sesión.
En 2006 la Corte Interamericana de Derechos Humanos sentenció que antes de tres años el Estado paraguayo debía restituir esas tierras, en manos de Roedel, condenado en su país en la década de 1980 por estafar a inversores alemanes con un esquema de venta fraudulenta de tierras en Paraguay.
Los terrenos están titulados a nombre de Kansol S.A. y Roswell S.A., firmas del ciudadano alemán.
Ireneo Tellez, abogado de la ONG local Tierraviva, dijo que la expropiación de los terrenos “dejaría un antecedente muy importante porque sería el primer trámite de expropiación hecho así”.