El Consejo de Patrimonio Cultural de Cuba y la Fundación “Finca Vigía” de EE.UU. suscribieron la renovación del acuerdo que establecieron en 2002 para preservar el legado del escritor norteamericano Ernest Hemingway en la isla, el cual incluirá otras áreas de trabajo en esta nueva fase.
La presidenta del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, Gladys Collazo, y la presidenta de la Fundación “Finca Vigía”, Jenny Phillips, firmaron el convenio en La Habana, con el viceministro cubano de Cultura, Fernando Rojas, y el congresista estadounidense James McGovern como testigos.
En los últimos 11 años de colaboración entre ambas instituciones, la fundación ha logrado digitalizar miles de documentos y fotografías de Hemingway que se conservan en la casona “Finca Vigía”, situada a unos 15 kilómetros del centro de La Habana.
El inmueble fue durante más de veinte años la residencia cubana del escritor y se convirtió en el “Museo Ernest Hemingway” después de su muerte el 2 de julio de 1961, cuando se suicidó de un disparo con una escopeta de caza en Idaho (EE.UU.).
Collazo dijo que con el nuevo acuerdo “la colaboración se profundiza y se va a otras áreas”, mediante trabajos “más específicos” que tienen que ver con la restauración y conservación del propio inmueble, y que incluirá a ingenieros y arquitectos.
Por su parte, Phillips, quien es cofundadora de la Fundación “Finca Vigía” y nieta del editor de Hemingway, consideró que aunque ya se ha hecho “un trabajo de peso”, el convenio suscrito será “realmente un nuevo comienzo”.
Otras voces se sumaron para resaltar la experiencia simbólica que significa el trabajo conjunto de conservación del legado de Hemingway en Cuba, en medio del diferendo político que viven La Habana y Washington hace más de 50 años.
El congresista McGovern, legislador demócrata de Massachusetts, afirmó que el presidente estadounidense, Barack Obama, “está al tanto de este proyecto” y “hay un vivo interés por el hecho de que se esté prolongando el acuerdo”.
El viceministro cubano Fernando Rojas recalcó a su vez que ojalá esta experiencia sirva para que los dos “pueblos vecinos no se pierdan el extraordinario tesoro” de su relación cultural.
Ernest Hemingway pasó largas temporadas desde 1939 y hasta poco antes de su trágica muerte en “Finca Vigía”, donde incluso escribió parte de algunas de sus más famosas novelas, entre ellas, “El viejo y el mar”, que le mereció el premio Nobel de Literatura en 1954.
El museo conserva una colección de unos 22.000 objetos personales y documentos que pertenecieron al novelista, entre libros, trofeos de caza, discos, armas, papelería como cartas y fotos, una máquina de escribir donde solía escribir de pie y el yate “El Pilar”, con el que salía a pescar y navegar por el mar Caribe que rodea Cuba.