La Secretaría de Hidrocarburos de Ecuador abrió las ofertas para la licitación de cuatro de los trece bloques de exploración y explotación de crudo en el sureste del país, una zona que se ha mantenido alejada de la actividad petrolera
Dos ofertas fueron presentadas por la china Andes, otra por la subsidiaria en Cuba de la española Repsol y una cuarta del consorcio formado por las estatales Petroamazonas (Ecuador), ENAP (Chile) y Belorusneft (Bielorrusia).
La sesión para la apertura de las ofertas fue rechazada en las afueras del edificio por un medio centenar de activistas ecologistas e indígenas que se oponen a que la industria petrolera se extienda al sur de la Amazonía ecuatoriana.
La Secretaría de Hidrocarburos precisó que la china Andes Petroleum Ecuador Ltd. presentó ofertas para operar los llamados bloques 79 y 83, Repsol-Cuba lo hizo para el área 29 y el consorcio Petroamazonas-ENAP-Belorusneft para el bloque 28.
El Gobierno ecuatoriano lanzó hace un Año la Undécima Ronda Petrolera en el sur de la Amazonía, dividida en 16 campos (tres de ellos para Petroamazonas) y en los que calculaba reservas de entre 400 y 1.600 millones de barriles de crudo.
El grueso de la industria petrolera de Ecuador se encuentra en la zona norte de la Amazonía, donde se producen unos 550.000 barriles diarios de crudo, 70% de los cuales lo extrae Petroamazonas y el resto compañías privadas contratadas bajo la modalidad de prestación de servicios.
En la ceremonia de apertura de las cuatro ofertas presentadas, el ministro ecuatoriano de Recursos Naturales No Renovables, Pedro Merizalde, recordó que las reservas calculadas del país hasta diciembre del año pasado eran de 1.800 millones de barriles.
Asimismo, destacó que un 12% de la renta petrolera se dirige a las comunidades que habitan en las cercanías de los proyectos de extracción, lo que garantiza la distribución de la riqueza en la región amazónica, históricamente olvidada del desarrollo nacional.
Merizalde destacó la presencia de líderes indígenas en la ceremonia, quienes apoyan la política petrolera del Gobierno y que confían en que, a diferencia del pasado, la actividad ahora aliviará la pobreza y marginación en la Amazonía.
El ministro aclaró a periodistas que la evaluación de las cuatro ofertas tomará unos cinco meses y que en mayo próximo podría anunciarse la eventual adjudicación.
De su lado, el gerente de Petroamazonas, Oswaldo Madrid, aseguró que la política petrolera del país, a diferencia del pasado, obliga a que las operaciones minimicen los impactos ecológicos y señaló que su empresa es líder en responsabilidad ambiental y social.
Asimismo, destacó la asociación alcanzada con las estatales de Chile y Bielorrusia lo que, según dijo, se debe al prestigio que ha alcanzado su empresa en el ámbito internacional.
En la ceremonia también intervino Rubén Gualinga, dirigente de la etnia amazónica Shuar, quien dijo confiar en que la nueva actividad petrolera redunde en la mejora de las condiciones de vida en su región y en todo el país.
Sin embargo, el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, Humberto Cholango, que participó en la protesta efectuada en las afueras de la sede de la Secretaría de Hidrocarburos, calificó como un “fracaso” la Ronda petrolera convocada por el Gobierno hace un año.
El hecho, dijo Cholango, de que sólo se hayan presentado cuatro ofertas, pese a que se licitaron trece bloques, hace presumir que aún hay “desconfianza” de la inversión extranjera en el país. También criticó que no haya habido una debida consulta a los pueblos que habitan en la zona de influencia.