MercoPress. South Atlantic News Agency
Pesquero español que operaba en Malvinas toma fuego al llegar a Montevideo
Las llamas en el Costa do Cabo fueron sofocadas en varias horas de trabajo La tripulación del pesquero de bandera española “Costa do Cabo” salió ilesa el lunes de un incendio que se declaró a bordo del barco cuando se encontraba atracado en el puerto de Montevideo, en Uruguay. El fuego se inició a las tres de la madrugada, hora local, y se originó en un compartimento de proa.
La causa que apunta la empresa armadora es un posible cortocircuito y las llamas fueron sofocadas después de varias horas de trabajo por los bomberos uruguayos y por la Prefectura Nacional Naval.
La tripulación del buque, que estaba formada por vecinos de la comarca y marineros peruanos, no sufrió daños y se encuentra bien. La mayoría regresará el jueves a casa mientras se evalúan los daños a bordo, que en principio parecen subsanables.
El “Costa do Cabo” es propiedad de la casa armadora Walvis Fish y acababa de llegar al puerto de Montevideo para descargar las capturas realizadas en el caladero de las Malvinas. Al parecer durante la travesía ya se había registrado otro incendio a bordo, aunque sin mayores consecuencias.
Pero el suceso del lunes fue más grave y según los medios locales fue necesario desplazar hasta nueve vehículos de bomberos para extinguir las llamas. Los mismos medios, como El País de Uruguay, indican que el fuego se pudo originar en la zona del pañol.
Sin embargo, el armador del barco, el cangués José Núñez, precisaba a última hora de la tarde del lunes que “el fuego empezó en el compartimento donde están las dos secadoras de ropa y parece que se trata de un cortocircuito”.
El “Costa do Cabo” es un barco de apenas diez años, de 70 metros de eslora y está considerado como uno de los más modernos de la flota que trabaja en el caladero de Falklands/Malvinas. El barco llevaba unos dos meses de marea y acudía al puerto para descargar las capturas, entre las que había especies como pota o merluza. La empresa Walvis Fish, que tenía su oficina en Bueu, también es propietaria de otro barco, el ”Novo Morriña.
