El presidente de Bolivia, Evo Morales, admitió este martes que la corrupción minó la credibilidad de su partido en las elecciones regionales y locales celebradas el domingo, en las que el oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) perdió algunas de sus plazas más emblemáticas. En una rueda de prensa en La Paz lamentó especialmente las derrotas sufridas en La Paz, departamento y ciudad, y en la urbe vecina de El Alto.
Las elecciones departamentales y municipales en Bolivia cerraron el domingo con el oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS), derrotado en principales plazas como La Paz y El Alto, nichos electorales del presidente Evo Morales, según boca de urna.