Ecuador decidió marginarse del proceso de paz con el ELN y ya no será sede de los diálogos que albergaba desde febrero de 2017 entre esa guerrilla y el gobierno de Colombia, según anunció Bogotá. La canciller María Ángela Holguín dio a conocer la sorpresiva postura asumida por Quito, tras la ola de violencia que golpea a Ecuador en la zona limítrofe con Colombia y que involucra a disidencias de la ya disuelta organización rebelde de las FARC.