La policía británica interrumpió una boda para 400 personas que se realizaba en Londres, después que el gobierno de Boris Johnson anunciara que sería más duro con las personas que infrinjan el confinamiento impuesto para frenar los contagios de coronavirus.
La policía metropolitana de Londres ha pedido a diversas organizaciones que asuman los costes de seguridad si quieren convocar protestas en la capital británica, informó el diario “The Guardian” en su edición digital