Para los turistas que pasan por al lado, el Palacio de López, sede de la Presidencia de Paraguay en Asunción, es un edificio majestuoso e icónico de la historia del país. Para los que trabajan ahí es una pesadilla: el ala oeste, que equivale al 40% del edificio, es un nido de termitas que están destruyendo los suelos y techos de madera del edificio.