Por John Kerry, Secretario de Estado de EE.UU. - El mes pasado en la ciudad de México pude recorrer los salones del Palacio Nacional y no pude evitar sentir el impacto de los poderosos murales de Diego Rivera que describen cuatro siglos de la historia mexicana, un destacable testamento de su larga jornada desde la subyugación a la floreciente democracia.