Un fin de semana sangriento se vivió nuevamente en Estados Unidos: primero, en la ciudad fronteriza de El Paso, un joven dio muerte a 20 personas y dejó 26 heridas al interior de un centro comercial; y luego, en Dayton, un sujeto asesinó a otras 9 y dejó 16 lesionados, antes de ser abatido por la policía.