La desaceleración económica golpea al viejo continente, lo que se refleja en que la zona euro creció a un ritmo anual de 1,8% en 2018, según la estimación preliminar publicada por la oficina estadística europea Eurostat.
Goldman Sachs rebajó su panorama de precios para el crudo en 2019, pero pronosticó una recuperación desde los niveles actuales en ausencia de una “gran” desaceleración económica mundial y una mejora de los fundamentos, junto a señales de que los principales productores están recortando su bombeo.