El gobierno argentino resolvió ampliar el cierre de fronteras que regía desde el 16 de marzo último “a las personas residentes en el país, y a los argentinos y las argentinas con residencia en el exterior”, a través de la totalidad de los pasos internacionales, puertos, aeropuertos y centros de frontera, en el marco de las medidas adoptadas para frenar el avance del coronavirus.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, estableció mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia la doble indemnización a los trabajadores por un periodo de 180 días en caso de “despidos sin justa causa” y “ante la necesidad de detener el agravamiento de la crisis laboral”. El sector empresarial lo recibe como una “mala noticia”.