El Ministerio de Interior británico indicó que el riesgo que el Reino Unido sufra nuevos atentados islamistas se mantendrá durante al menos dos años en el nivel actual. El gobierno mantiene la alerta terrorista como “grave”, el cuarto nivel en una escala de cinco, lo que significa que “un ataque es altamente probable”, en comparación con el nivel “crítico”, el más elevado, que refleja la posibilidad de un atentado “inminente”.