El presidente argentino, Javier Milei, y el ministro de Economía, Luis Toto Caputo, pospusieron su viaje a Estados Unidos del domingo al lunes, según se anunció en Buenos Aires. Por lo tanto, sus reuniones con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, y otros compromisos se han reprogramado en consecuencia.
El objetivo principal del viaje es obtener un paquete especial de ayuda financiera del gobierno estadounidense, mediante un encuentro bilateral entre Milei y Donald Trump.
Argentina espera recibir entre 4.000 y 8.500 millones de dólares del Fondo de Estabilización Monetaria del Tesoro estadounidense para afrontar los vencimientos de deuda del próximo año.
Un rescate para Argentina se ha vuelto cada vez más urgente tras el aumento del riesgo país a 1.500 puntos y el reajuste del valor del dólar a alrededor de 1.500 pesos argentinos por unidad.
Asimismo, la delegación argentina espera conversar el miércoles con el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent.
Esta volatilidad se agravó tras las elecciones federales intermedias del 7 de septiembre en la provincia de Buenos Aires, donde el gobernador Axel Kicillof jugó una carta política en su bastión peronista kirchnerista, seguido de repetidos reveses en el Congreso para La Libertad Avanza (LLA) de Milei, donde la mayoría de los vetos presidenciales fueron rechazados.
Además, Milei tiene previsto asistir al discurso de Trump en la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York y presentar su propio mensaje ante el foro.
La agenda del líder libertario también incluye una recepción ofrecida por el presidente Trump, así como a reuniones con líderes del Congreso Judío Mundial y del Consejo Judío Latinoamericano. El mandatario argentino también espera conversar con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.