El expresidente brasileño Jair Bolsonaro ingresó en un hospital de Brasilia tras sentirse mal durante su arresto domiciliario. Uno de sus hijos, el senador Flávio Bolsonaro, informó que su padre sufría hipo intenso, vómitos e hipotensión.
Recientemente se sintió mal, con hipo intenso, vómitos e hipotensión, y acudió al hospital de Brasilia porque era una emergencia, declaró Flávio Bolsonaro.
El exmandatario, de 70 años, quien recientemente fue condenado a 27 años de prisión por su participación en un intento de golpe de Estado, se encuentra bajo arresto domiciliario desde agosto. Su hijo, quien proporcionó detalles a la prensa a la salida del hospital, afirmó que el hipo fue tan intenso que le impidió respirar durante casi 10 segundos.
El capitán retirado del Ejército tiene antecedentes de problemas de salud recurrentes, algunos de los cuales están relacionados con un apuñalamiento que sufrió en 2018. Esta es la segunda vez que es hospitalizado desde que comenzó su arresto domiciliario.
Bolsonaro pasó la noche en el hospital DF Star bajo custodia de agentes de la Policía Penal del Distrito Federal. Según el cardiólogo Leandro Echenique, quien lo atiende desde 2018, se espera que permanezca hospitalizado por el momento.
En las últimas semanas, Bolsonaro se ha sometido a tomografías computarizadas, le han extirpado lesiones cutáneas y ha recibido tratamiento con hierro intravenoso. También padece hipertensión y reflujo gastroesofágico.
La ex primera dama Michelle Bolsonaro informó en redes sociales que su esposo se sometió a pruebas y está recibiendo medicación intravenosa. El concejal Carlos Bolsonaro (PL-RJ) declaró en una transmisión en vivo que su padre se estaba sometiendo a pruebas de detección de cáncer y enfrenta un estado de salud delicado, además de mencionar una posible hernia. En abril, Bolsonaro se sometió a una larga operación para resolver una obstrucción intestinal que lo mantuvo hospitalizado durante tres semanas.