El presidente argentino, Javier Milei, ordenó este miércoles a la ya reducida misión de su país en la Conferencia de las Partes 29 de Bakú (Azerbaiyán) que abandone el evento, en rechazo a la idea de cambio climático planteada por la llamada Agenda 2030, a la que el mandatario libertario dice oponerse.
Se teme que la decisión de Milei repercuta en las empresas que operan en el país sudamericano, cuyo dudoso cumplimiento de las políticas medioambientales mundialmente aceptadas podría poner en peligro su participación en mercados globales.
Las preocupaciones ecológicas han sido una de las razones del presidente francés, Emmanuel Macron, para oponerse al Tratado de Libre Comercio Mercosur-Unión Europea, que abriría la puerta a competidores no sujetos a las mismas normas climáticas.
Milei se autoelogió en las redes sociales por su medida, que no implica que Argentina se retire del Acuerdo de París para frenar el calentamiento global que el país firmó en 2015 y que fue ratificado por el Congreso en 2016.
Sin embargo, el Gobierno argentino está muy alineado ideológicamente con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, que ha prometido retirarse de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, por lo que es de esperar que Buenos Aires siga el mismo camino.
La delegación argentina estuvo integrada por tres técnicos de la Subsecretaría de Medioambiente, a quienes se les ordenó regresar a la brevedad para no entorpecer las negociaciones.