MercoPress. South Atlantic News Agency
Argentina retira de subasta para desguace un barco de la guerra de 1982
El capitán del Sobral, Sergio Gómez Roca, y otros siete tripulantes murieron en acción durante la guerra del Atlántico Sur de 1982. El Ministerio de Defensa de Argentina anunció el miércoles que retira al aviso ARA Alférez Sobral de una lista de unidades antiguas que serán subastadas para desguace, dada la histórica participación del buque en el conflicto del Atlántico Sur de 1982 por las Islas Falkland/Malvinas. La decisión fue adoptada por el propio ministro Luis Petri, se explicó a través de un comunicado. Ahora se espera que el buque se convierta en un museo.
La subasta de las cuatro unidades -incluido el Alférez Sobral- está prevista para el 13 de septiembre en la Base Naval de Mar del Plata, según el Boletín Oficial. Por el histórico buque, la Armada Argentina pedía un mínimo de AR$ 14,2 millones (alrededor de US$ 11.000 al tipo de cambio no oficial conocido como “blue”, un eufemismo para “mercado negro”).
La venta para desguace de las otras tres naves dadas de baja del servicio activo -dos corbetas y un buque hidrográfico- se llevará a cabo según lo previsto, mientras que el Sobral se entregará al mejor postor para la creación de un museo en una licitación separada. Las instituciones y ciudadanos particulares interesados en el proyecto podrán presentar sus propuestas hasta el 16 de diciembre, explicó también la Armada Argentina. Mientras tanto, partes del buque como la campana y un cañón serán restaurados.
En la noche del 2 de mayo de 1982, el Sobral quedó inutilizado tras sufrir daños en su puente y sistemas de navegación a causa de dos misiles británicos disparados desde un helicóptero. El capitán del Sobral, Sergio Gómez Roca, y otros siete tripulantes murieron en combate.
Construido en Estados Unidos en 1944, el buque de 43,6 metros de eslora y 10,3 de manga sirvió bajo el nombre de USS Salish en el teatro de operaciones del Océano Pacífico antes de ser entregado a la Armada Argentina en 1972, donde fue bautizado en homenaje al alférez José María Sobral, explorador militar y geólogo destacado por su participación en actividades relacionadas con la Antártida.
