El presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, dijo que revertir la reforma de la seguridad social implicaría “un gran retroceso” para su país y señaló que parece haber mucho apuro para concretar esa medida.
La posibilidad fue puesta sobre la mesa cuando la agrupación Pit-Cnt que agrupa a los sindicatos del país reunió las firmas suficientes para realizar un plebiscito sobre el tema, aunque aún está pendiente la decisión final del Tribunal Electoral. Lacalle insistió en que si el Pit-Cnt se sale con la suya, los jubilados y todas las generaciones futuras saldrán perjudicados. Si se validan las firmas, la consulta popular se llevará a cabo en octubre simultáneamente con las elecciones presidenciales.
Todos los partidos políticos dijeron que era urgente reformar la seguridad social, argumentó Lacalle sobre un proyecto de ley aprobado por el Congreso tras su giro de 180º respecto de sus promesas de campaña. Algunos dirigentes importantes dijeron que había que bajar la edad de jubilación, pero al final algunos de estos partidos políticos estuvieron en el gobierno durante 15 años y no la impulsaron, prosiguió el mandatario.
Derogar la reforma de la seguridad social sería perjudicial para los jubilados pero, sobre todo, para las generaciones futuras porque se habla de diálogo social, y ya ha habido diálogo social; lo que no existía era el coraje de hacer un reforma necesaria como la que hizo este gobierno, subrayó Lacalle.
Si el plebiscito sigue adelante, Lacalle confirmó que defenderá el mecanismo actual, pero insistió en que no hay apuro por dar más detalles sobre el tema y prometió hacerlo cuando llegue el momento. En opinión del presidente, la ciudadanía tiene otros problemas que afrontar primero.
Los principales sindicatos de Uruguay realizaron una huelga en marzo del año pasado para protestar contra la reforma de la seguridad social que Lacalle había prometido no modificar antes de ser electo.