La Corporación para el Desarrollo de las Islas Falkland, FIDC, todavía están a la espera de noticias del Departamento de Obras Públicas para saber cuando las nuevas instalaciones, a inaugurar, del Depósito de Lanas, podrán contar con la conexión eléctrica.
El director gerente de la FIDC, Zachary Franklin afirmó que dicha conexión resulta fundamental para contar con la habilitación oficial del local. Según el propio Franklin, ha realizado múltiples solicitudes al Departamento de Obras Públicas y también ha pedido a los legisladores electos de las Islas, para que presionen a los departamentos gubernamentales con influencia en dichos temas. Pero de acuerdo a la asociación de constructores de las Islas, FIC, la planta de generación eléctrica sólo ha podido indicar que no será posible dicha conexión antes de las Pascuas.
El legislador MLA Gavin Short critico de la situación, sostuvo que la nueva instalación se ha convertido en un galpón del diablo, o por lo menos en algo parecido. La respuesta fue que la construcción del depósito ha sufrido varios inconvenientes incluyendo la voladura de una claraboya. El secretario Michael Poole resaltó que aún hay algunos temas puntuales de la edificación que abordar, algunos mayores, otros menores, pero aún no se han terminado”
De todos modos se explicó que una mayor superficie dentro del depósito de lanas ha sido habilitada y posiblemente pueda ser utilizada para almacenar algunos contenedores como zona de depósito. También se aclaró que camiones con remolques ya pueden operar dentro de la planta.
La conclusión del depósito de lanas urge pues el mercado internacional está lejos de ser fluido y si bien la fibra orgánica y libre de impurezas de las Islas es apetecida, hay dificultades para su colocación. Empero recientemente el gobierno y administración de las Islas han informado que por los próximos meses la prioridad será dedicarse a la infraestructura necesaria, jurídica, logística y financiera, para el comienzo de la actividad petrolera, impulsada por la empresa israelí Navitas. Empero admiten esto puede llegar a retrasar otras obras en curso si bien las del puerto nuevo, recién adjudicado y de la planta de generación eléctrica continuarán con el foco de atención.