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Los partidos de derecha controlarán la nueva asamblea constituyente de Chile
La ultraderecha y la derecha tradicional suman mayoría absoluta de escaños por lo que no necesitarán negociar nada con la izquierda El ultraderechista Partido Republicano de José Antonio Kast obtuvo el domingo una contundente victoria en las elecciones para formar el consejo de 50 miembros que redactará una nueva Constitución para Chile, después de que el texto reformado el año pasado fuera rechazado por el 62% de los votos en referéndum.
El Partido Republicano, partidario de mantener la actual Constitución chilena de los años del régimen militar de Augusto Pinochet, obtuvo alrededor del 35,48% de los votos, con lo que se hizo con 22 escaños que le otorgarían poder de veto durante las deliberaciones.
El Servicio Electoral de Chile (Servel) también confirmó que Unidad por Chile (izquierda) obtuvo el 28,45% de los votos (17 escaños) y Chile Seguro (centro derecha) el 21,14% (11 escaños).
Con estos resultados, la extrema derecha y la derecha tradicional suman mayoría absoluta y superan los 30 escaños necesarios para aprobar las nuevas normas constitucionales sin necesidad de pactar con la izquierda, lo que les permitirá marcar el rumbo de la nueva propuesta de Carta Magna.
La ultraderecha arrasó en la mayoría de las 16 regiones de Chile e incluso ganó feudos tradicionalmente en manos de la izquierda, como Valparaíso o la Región Metropolitana de Santiago.
El Consejo Constitucional recibirá, para su revisión y ajustes, un texto previamente redactado por expertos con 12 principios esenciales que no podrán ser modificados, por ejemplo, el que consagra a Chile como una economía de mercado con participación estatal y privada.
Para esta jornada electoral se habilitaron 38.665 mesas de votación en todo el país a lo largo de 2.932 localidades. El censo electoral incluía a 15 millones de personas.
Está previsto que los 50 nuevos consejeros constitucionales, elegidos por votación popular, comiencen a trabajar el próximo 7 de junio y dispondrán de cinco meses para discutir un proyecto constitucional ya elaborado por un comité de expertos.
Posteriormente, en diciembre de 2023, los chilenos volverán a las urnas para votar a favor o en contra del texto que surja de ese trabajo.
