Un sospechoso detenido en Colombia en relación con el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci, ocurrido el 10 de mayo, amenazó este viernes con matar a funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) durante las audiencias.
Tras la amenaza, las autoridades de Cartagena decidieron que durante las audiencias, que serán públicas y virtuales, no se verán los rostros ni del fiscal ni del magistrado.
Los detenidos la semana pasada fueron Francisco Luis Correa Galeano, quien armó el grupo y fue su coordinador financiero; Wendel Carrillo, quien presuntamente hizo los disparos, y Jeiverson Zabaleta Arrieta, quien habría transportado a los asesinos a la isla de Barú.
También fueron aprehendidos Marisol Londoño y su hijo Cristian Camilo Monsalve Londoño por haber informado a los asesinos sobre los movimientos de Pecci, quien estaba de luna de miel con su esposa Claudia Aguilera.
Se dice que Francisco Luis Correa Galeano tiene antecedentes penales. Se cree que era el enlace de un peligroso grupo de sicarios en el Valle de Aburrá.
A pesar de estas detenciones, las autoridades colombianas buscan al ciudadano venezolano Gabriel Carlos Luis Salinas, quien presumiblemente se montó en la moto de agua en la que viajaba el sicario desde Playa Blanca hasta el hotel Decamerón.
La audiencia de imputación está prevista para este lunes.
Pecci tenía 45 años. Pertenecía a la Unidad contra el Crimen Organizado y dirigía la sección de Narcotráfico. Fue asesinado de tres disparos por dos autores durante su luna de miel en una isla turística frente a Cartagena, Colombia. Su asesinato podría haber sido planificado desde las cárceles de Estados Unidos. Se cree que organizaciones criminales brasileñas y paraguayas también han estado implicadas.
Autoridades colombianas, estadounidenses y paraguayas están trabajando conjuntamente en la investigación del crimen.