El economista brasileño Adriano Pires rechazó la oferta del presidente Jair Bolsonaro para presidir la petrolera estatal Petrobras luego de destituir al general Joaquim Silva e Luna, quien ajustó repetidamente el precio del combustible en contra de las recomendaciones del jefe de estado.
Pires tomó su decisión este lunes luego de que fuentes judiciales le advirtieran de un posible conflicto de intereses con su nombramiento.
En una carta dirigida al ministro de Minas y Energía, Bento Albuquerque, Pires agradeció la invitación, pero alegó que su actividad profesional en firmas consultoras le impedía asumir ese cargo.
”Tenía claro que no podría conciliar mi trabajo de consultoría con la presidencia de Petrobras. Inmediatamente inicié los trámites para desvincularme del Centro Brasileño de Infraestructura (CBIE), una consultora que fundé hace más de 20 años y que ahora dirijo en sociedad con mi hijo. Sin embargo, en todo el proceso me di cuenta de que lamentablemente no tengo las condiciones para hacerlo en tan poco tiempo”, escribió Pires.
Varios accionistas minoritarios de Petrobras habían cuestionado el conflicto de intereses resultante de la actividad profesional del economista.
Silva e Luna había implementado una serie de ajustes constantes a raíz del precio internacional del crudo, lo que tuvo un impacto significativo en la inflación de Brasil en un año en el que Bolsonaro buscará la reelección.
Los combustibles habían subido un 33% interanual en febrero. La guerra en Ucrania empeoró el escenario internacional, por lo que Petrobras aumentó el precio de la gasolina en un 18,8% y el del diésel en un 24,9%.
El nombramiento de Pires aún no había sido aprobado por el directorio de Petrobras, pero el viernes, el Tribunal de Cuentas de la Unión había advertido sobre la existencia de un posible conflicto de intereses con su nombramiento.
Pires fue el segundo revés consecutivo de Bolsonaro con respecto a Petrobras. El domingo pasado, Rodolfo Landim, exejecutivo de la petrolera a quien el presidente había propuesto para encabezar el directorio, dijo que prefería permanecer como presidente de Flamengo, uno de los clubes de fútbol más populares de Brasil.