Las autoridades navales de Canadá han dejado de buscar sobrevivientes del pesquero español Villa de Pitanxo, que se hundió abruptamente frente a Terranova el martes, se anunció.
Solo tres personas de una tripulación de 24 han sobrevivido al hundimiento del buque español en la madrugada del martes a 250 millas de la costa canadiense de Terranova. Se han recuperado nueve cuerpos y 12 marineros siguen desaparecidos.
Los expertos advirtieron que aún era demasiado pronto para determinar las causas del accidente, pero hubo consenso en que el barco fue engullido por las aguas del Atlántico Norte en unos 13 minutos.
El buque con base en Galicia, construido en 2004, sufrió un embate del mar en la popa mientras la tripulación recogía la pesca. “El hundimiento fue muy repentino, muy rápido”, explicó Javier Touza, presidente del gremio de armadores de Vigo. El mal tiempo, con olas de 10 metros y vientos de 80 km/h parece ser la principal causa de la tragedia.
Todavía se desconoce si los tripulantes desaparecidos tuvieron tiempo de ponerse los trajes de emergencia, pero eso es algo que toma tiempo y todo fue muy rápido, dijo a periodistas un experto gallego.
Los supervivientes han sido identificados como el capitán Juan Padín, su sobrino Eduardo Rial y un marinero de Ghana, Samuel Kwesi Koufi, que siguen en estado de shock a bordo de uno de los barcos de rescate.
Padín estaba en el puente dirigiendo a la mitad de la tripulación, que se encontraba a popa recogiendo la pesca mientras la otra mitad estaba dentro de la nave descansando, según La Voz de Galicia. El mar estaba muy agitado, con grandes olas pero no peor que otras veces, se informó.
Mientras los marineros tiraban de los cables para recoger la captura, una oleada de mar entró por la rampa de popa llenando el barco de agua en un abrir y cerrar de ojos. En ese momento, los compartimentos de cubierta están abiertos y hay mucho peso y equipo sobre la cubierta, lo que podría haber contribuido al hundimiento repentino.
Si se confirma que el naufragio ocurrió de esta manera, esto explicaría por qué sobrevivieron quienes estaban en el puente. Los primeros en caer al agua serían los marineros que estaban afectados a la faena y es posible que quienes estaban dentro nunca hayan tenido la oportunidad de salir.
Algunos expertos también señalaron que Villa de Pitanxo no transportaba mucha carga, que en mal tiempo se tambalea y causa inestabilidad.
Las autoridades canadienses también anunciaron este miércoles que la búsqueda de sobrevivientes se había suspendido 36 horas después del hundimiento debido a las duras condiciones climáticas, que hacen imposible encontrar sobrevivientes. La tripulación ahora figura oficialmente como desaparecida en el mar.
“Lamentablemente, a las 4 p. m. … luego de una búsqueda exhaustiva por parte de un número significativo de aeronaves y embarcaciones SAR durante más de 36 horas, cubriendo más de 900 millas náuticas cuadradas, la búsqueda de los 12 pescadores desaparecidos a bordo del FV Villa de Pitanxo ha ha sido suspendida”, explicó el teniente comandante Brian Owens, portavoz del centro de rescate de Halifax. Agregó que la región estaba experimentando vientos de 74kp/h y marejadas de hasta 5,5m.
El Centro de Coordinación de Rescate Conjunto en Halifax informó originalmente el martes por la noche que el número de muertos había aumentado a diez, pero el servicio de salvamento marítimo de España dijo que había habido un error en el conteo y que las autoridades canadienses habían reducido la cifra a nueve muertes confirmadas. “Parece que el error se debió al hecho de que la recuperación de los cuerpos se llevó a cabo en diferentes barcos y que un cuerpo se contó dos veces”, dijo José Luis García, director del servicio de salvamento marítimo de España, a la cadena española TVE.
El ministro español de Agricultura y Pesca, Luis Planas, y funcionarios locales de pesca describieron el barco hundido como moderno y preparado para soportar el clima típicamente duro de la zona. Planas dijo que fue la “peor tragedia para nuestra flota pesquera en 38 años”.
La tripulación incluía a 16 españoles, cinco peruanos y tres trabajadores de Ghana, según el servicio de salvamento marítimo de España.
El parlamento español guardó un minuto de silencio en la apertura de la sesión del miércoles, mientras que el noroeste de Galicia, que tiene una fuerte industria pesquera, declaró tres días de luto.