Al igual que sucede en el sur de Chile, Argentina y hasta en Uruguay, el calor y el déficit hídrico se han sumando para también ocasionar incendios de campos en las Islas Falkland.
Según crónica del Penguin News, en la víspera de Año Nuevo un fuego se desató en el predio agropecuario de Murrell Farm en la isla Este y se mantuvo durante dos días, terminando con las pasturas de varias hectáreas.
Uno de los titulares del campo Lisa Lowe comentó al semanario de las Islas Penguin News, que a mediados de semana todavía estaban extinguiendo lo que se denomina en jerga de bomberos, puntos calientes.
Un equipo de once personas del Departamento de Bomberos y Rescate de las Falklands fue enviado para ayudar a controlar el incendio, el cual tuvo a Lisa y a su hijo Nathan dos días y noches luchando contra el siniestro. Paul Faría también pasó la primera noche con nosotros ayudando, dijo Lisa muy agradecida.
Lisa relató que el fuego fue divisado en la víspera de Año Nuevo cuando su marido Adrian se dirigía a levantar turistas de la Cabaña junto a una pingüinera cuando vio el humo.
Enseguida enviaron al hijo Nathan para que brindara un panorama de la situación a la vez que recibían una llamada de Sparky Ewen de los Servicios de Helicópteros quien comunicaba que había un fuego próximo a la línea de costa del campo de ellos, opuesto al Monte Lowe.
Desafortunadamente para cuando llegó Nathan al lugar el fuego estaba muy adelantado como para que él pudiera hacer algo al respecto.
Se llamó al Servicio de Bomberos y Rescate, lo que les significó un viaje de hora y media mayoritariamente a campo traviesa, y por suerte las sendas de huellas están bastante secas en esta época del año. El servicio de Bomberos viajó en dos Land Rovers con un tanque de mil litros y bomba de aspersión junto a un vehículo con orugas y una excavadora.
La excavadora se utilizó para hacer un rompe-fuego en torno al incendio para así prevenir su expansión. Unos 40 a 50,000 litros de agua se utilizaron contra el fuego. Se trató de un esfuerzo mayor para el equipo y les tomó más de dieciocho horas para finalmente poder controlar el incendio.
Cuando se le preguntó a Lisa qué ocasionó el fuego dijo que por la mañana hubo rayos, tiene que haber sido un rayo, estamos bastante seguros, pues también hay una gran rajadura en una de las rocas del predio.
Igualmente al retorno el servicio de Bomberos y Rescate tuve que hacer frente a un incendio en Stanley cuando un tambor con restos de ramas y hojas de jardín tomó fuego, se extendió al césped devorándose árboles, un cerco perimetral y un invernáculo de polietileno. (PN)