El presidente de Colombia, Iván Duque, dijo este miércoles a su predecesor Juan Manuel Santos que no él no se involucraría en controversias con ex mandatarios.
Santos había criticado la intervención de Duque en la 76ª Asamblea General de las Naciones Unidas, donde calificó el acuerdo de paz negociado por Santos con la guerrilla de las FARC como frágil.
El ex gobernante insistió en una entrevista radial que el Acuerdo fue uno de los hechos más relevantes de la historia reciente del país y que el mensaje de Duque en la ONU lo entristeció.
El premio Nobel de la Paz también insistió en que el actual jefe de Estado había perdido credibilidad al hablar mal de los Acuerdos en una organización tan importante como la ONU. La ONU lo sabe porque estaba ahí y les pedimos que estuvieran ahí, ellos saben todo lo que se ha hecho y por eso exaltan tanto el proceso de paz. Cuando el presidente va y dice lo que dijo, el efecto es que pierde credibilidad; su gobierno, pero también el país. Lo están diciendo en el foro más inapropiado porque allí conocen los acuerdos mejor que nadie”, explicó Santos.
Consultado sobre estos comentarios, Duque respondió que no entraría en controversias con “ex presidentes” y, dado que él era el actual presidente, no era apropiado que él analizara esos temas públicamente.
Sin embargo, Duque dio más detalles sobre el hecho de que cuando llegó al poder se encontró con un frágil proceso de paz.
Siempre debemos decir la verdad. Hay un proceso en construcción que es frágil ... todos los procesos de paz en el mundo tienen esos elementos de fragilidad, dijo Duque.
Sobre estos denominados elementos de fragilidad, Duque explicó que en 2018 Iván Márquez era prófugo de la justicia y hoy lidera uno de los grupos disidentes de las FARC. También habló de otros miembros de la exguerrilla como Jesús Santrich y Marlon Marín, quienes a pesar de haber aceptado el Acuerdo de Paz, habían vuelto a acercarse a la ilegalidad.
Si hay personas que se sienten incómodas porque alguien dice la verdad, que se sientan incómodas, dijo Duque.
El actual mandatario insistió en que “la paz no tiene dueño ni es de nadie, ni es patrimonio político de una persona. La paz es un propósito nacional y lograr la paz requiere de legalidad, que haya impunidad cero.... Señaló además que las debilidades deben superarse con el fortalecimiento de las instituciones”.
Duque había dicho ante la ONU que el país avanzaba en la construcción de la pacificación con legalidad, superando incluso los efectos de la pandemia y agregó que su administración había hecho más por la implementación del tratado que el propio gobierno de Santos, quien a su vez indicó que Duque había mostrado un doble rasero en el tema de la paz.
El asesor de la Presidencia de Duque, Emilio Archila, encargado de la Estabilización y Consolidación del acuerdo de paz, dijo que los que se burlaron fueron los que pretenden seguir utilizando este tema de implementación como algo para dividir a los colombianos”.