El Dr. Liam Fox afirmó que tiene la experiencia y la visión para revitalizar la Organización Mundial del Comercio (OMC) tras pasar a la segunda ronda del proceso de selección para convertirse en el próximo Director General.
Hoy, tres candidatos, Jesús Seade, Tudor Ulianovschi y Hamid Mamdouh, se han retirado de la carrera. El Dr. Fox les agradeció sus contribuciones tan positivas al debate en torno al comercio mundial. La siguiente ronda del proceso comenzará el jueves 24 de septiembre.
Hablando desde Ginebra, donde se ha reunido con representantes de todo el mundo, el ex secretario de Comercio Internacional del Reino Unido dijo: “Quiero que esta elección representa una opción real; necesitamos al candidato mejor calificado para el trabajo, con la capacidad de cumplir lo que los miembros demandan. Estoy seguro que yo soy ese candidato”.
El primer ministro británico, Boris Johnson, nominó al Dr. Fox como candidato para reemplazar al actual director general, Roberto Azevedo, quien dejó su cargo después de siete años.
El Dr. Fox está haciendo campaña para restaurar la credibilidad de la OMC con base en un sistema de comercio basado en reglas, la reforma de su Órgano de Apelación, y una verdadera igualdad de género al garantizar que al menos la mitad de su equipo gerencial sean mujeres, además de trabajar más de cerca con otros organismos internacionales.
Asegura que desde el primer día de su nombramiento trabajará para garantizar que la pandemia mundial no conduzca a un aumento del proteccionismo, y hará que los países en desarrollo más pequeños y las pequeñas empresas sean su prioridad, así como “garantizar que el comercio mundial funcione para todos”.
El viernes advirtió que es vital que la OMC elija un líder con las calificaciones adecuadas para enfrentar una serie de desafíos urgentes.
No podemos abordar los retos como si nada pasara. La OMC enfrentaba desafíos muy importantes antes del COVID-19. Esos vientos en contra resultan aún más urgentes debido a la pandemia
“La disminución de los volúmenes comerciales, los desacuerdos sobre la agenda normativa y, lo que es más importante, la ruptura del consenso multilateral que permitió establecer la OMC son desafíos que debemos abordar directamente. La OMC necesita un liderazgo con una fe inquebrantable en el poder de los mercados abiertos para impulsar el desarrollo económico y la prosperidad”.